lunes, 20 de octubre de 2008

Las Fuerzas Armadas versus Batman

Eran las 21hs pasadas. Estaba sola en el M1n1st3r1o d D3f. Faltaba poco para terminar la jornada laboral y empezar el fin de semana.
De repente, un ruido metálico en la oficina de mi jefe. La luz estaba apagada, pero por la ventana aparecían unos rayos que me permitían ver en la penumbra.
La cosa horrenda daba vueltas sin parar en el techo, volaba rápido en círculos. El ruido metálico fue el bicharraco al pegarle a la lámpara del techo.
La oficina de mi jefe linda con la mía. La puerta abierta y con el bicho enloquecido me hicieron entrar en pánico. Necesitaba alcanzar la manija de la puerta para cerrarla, pero el bicho daba vueltas tan rápido que no me dejaba entrar a la habitación y agarrar el picaporte. En un acto de lucidez y valentía, se me ocurrió empezar a cerrar la puerta desde el marco, empujando de a poco desde la junta y rogar que funcionara. La puerta comenzó a moverse al tiempo que yo tenía en mis manos mi bolso por si el bicho escapaba y, en picada mortal, caía sobre mí.
¿Qué hago ahora? A esta hora ya no queda nadie en el M1n1ster1o (sobre todo siendo viernes!). Llamo a "Administración", allí pueden darme alguna solución.
Como lo sospeché, del otro lado de la línea alguien me contaba, jocosamente (seguro notó el tono nervioso de mi voz) que ya no había nadie en el edificio para ayudarme, "y yo tampoco voy a ir, a mí también me dan miedo esos bichos", concluyó.
Frente a semejante sentencia, inquirí: ¿y no me podés mandar a un soldado aunque sea?!. Después de todo, estamos en la sede del Est May Conj y del 3j3rc1to!!. Hombre valientes por favor!!!
A los minutos golpean a la puerta: dos soldados. El que trae una pala, pregunta: ¿Aquí es donde hay inconvenientes?. La mueca de mi rostro le contestó.
Excelente. La primera vez que el verde oliva me alivia y me hace sonreir.
Amablemente invito a los soldados amigos a pasar y les cuento de mi acto heróico al haber encerrado al bicho (para que vean que no soy sólo... lo que soy).
Como suele dictar la Ley de López Murphy, los muchachos entraron y el bicho no estaba. Para mi sorpresa, las ventanas que creí abiertas, estaban cerradas (ergo, nada me asegura que no vuelva a entrar otro día!!).
Al prender la luz, los mirciélagos suelen esconderse. Los golpes de pala y puños en los muebles intentaron que saliera, pero nada.
Momento de lucidez N°2: soldado sube al escritorio para tratar de ver si estaba arriba del aire acondicionado. Efectivamente, sus instintos no equivocaron y dieron en el blanco. Agazapado estaba el bicho que "no es chiquito, eh?", comenta el de verde.
Momento de lucidez N°3: quien escribe, saluda a los soldados y cierra la puerta. Ahí se los dejo muchachos!.
15 o 20 minutos de batalla campal con golpes de pala, corrida de muebles, carcajadas y puteadas de los soldados que, después de todo, dejaron de hacer guardia para matar a Batman.
La puerta se abre y la oficina está desordenada. No hay cadáver. Pero los soldados prometen que han cumplido con su deber, que el bicho se fue y no va a volver. No creen que en el estado de voladura que lo dejaron le permita volver a embocarle al huequito del tapa rollos.
Cansados después del combate, piden que los llame si vuelvo a tener un inconveniente. Miro la hora en el reloj: 21.45. Quince minutos para terminar el día y la semana. Los miro, les agradezco enormemente y sentencio: si vuelve a entrar, nos hacemos todos los boludos.
Por supuesto, la puerta aún está cerrada.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Y lógico, pese a que batman no atacaba a gatuvela x una cuestión sexista, uno nunca sabe sino vino medio copeteado y de repente a uno le da un sopapo... más vale llamar al ejercito, después de todo si 2 guasones, un pingüino, chuarcheneguer, la mina hiedra, 2 versiones de Doscaras, ROBIN, etc... si ninguno de ellos pudo acabar con el alado nocturno, más vale llamar al ejercito!!!!

a por él

Dicho sea de paso, tampoco pudieron con el alado, los de verde, solamente lo azuzaron y pudo escapar..

pd. I`LL BE BACK...

CHAN....

(igual, segundas partes nunca fueron buenas)

Anónimo dijo...

Al entrar el primero de verde Batman pensó: "Zás! El Acertijo!"
Se escondió, pero al ver* que eran 2 supo que algo andaba mal.
Seguramente la chiquita de la oficina lindante había tirado algún gas dopador típico de heroínas de Ministerio. Se escondió un rato, pero Dios sabe lo bien entrenada que está nuestra Fuerza Militar. Estrategicamente idearon un plan secreto, único, perfecto, camuflado con una simple pala. Nos salvaron de una tragedia.
Gracias Justicieros!
Gracias Heroína de Ministerio!!

*no literalmente, sabemos q los murcis no ven, tienen una capacidad de rastreo similar a los radares. A esta redacción no se le escapa una.

PD: I´m back

La Vidu dijo...

Santi: el "I´ll be back" me asusta un poco. Es más, ayer lo escuché chirriando afuera. como es lógico, y entendiendo que ni las FFAA pueden con él, la puerta de la oficina de mi jefe se cierra apenas él se va. Ahora también se sumaron todas las demás y las ventanas :P ... por las dudas.

Meni: yeah!! you´re back! bienvenida!!!
lo de la heroína del Ministerio me lo dice por lo drogada? jajaja!

Anónimo dijo...

Exacto, iba a poner fumona pero daba a descontrol. Y usted está en un Ministerio de la República Argentina.

Kika dijo...

En el departamento donde viví hasta hace unos meses, llegaron a entrar no uno sino dos de esos bichos horribles (Batman y Robin). Pude sacarlos después de rociar a uno con Raid matacucarachas y arrojarlo en estado de semiinconsciencia por la ventana, mientras el otro, abandonando a su compañero se fue por la puerta.
Mi hazaña corrió de boca en boca, y a los pocos meses de haber corrido a mis bichos, me llamaron de otro departamento para que saque uno que se había metido. Lo hice con éxito. Ahora soy conocida como Poison Kika.

Maguitxu dijo...

aaaaaaaaaajajajajajajajajjajajaja
"¿y no me podés mandar a un soldado aunque sea?!... dos soldados. El que trae una pala, pregunta: ¿Aquí es donde hay inconvenientes?. " jjjjjjjjjjjjjjjaaaaaaaaaajajajajajjaj me morí me morí! jjjjjjajajajajajajaja